Que en tremendo enredo se metieron los hermanos Cipriano y Pascual Charrez Pedraza, luego de que el segundo impugnó ante tribunales federales la candidatura del legislador local con licencia y quien pretende saltar a una diputación federal. Este recurso legal ha impedido que el primero pueda iniciar campaña y en una de esas le da madruguete a su consanguíneo. Con estos hermanos para qué te buscas enemigos.

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que el equipo de campaña de la candidata a diputada federal por el distrito Huejutla, Sayonara Vargas Rodríguez, está buscando personas que sean originarias de este municipio y conozcan a detalle sus comunidades, a fin de guiar a la exsecretaria de Educación Pública en sus recorridos, pues aunque la aspirante a legisladora presume tener raíces indígenas y conocer su comunidad, lo cierto es que necesitará ayuda para llegar a las localidades más apartadas.

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que la diputada local por el distrito de Huejutla de Reyes, Norma Andrade Fayad, ya es conocida en su región como Lady Balones, en los recientes días la legisladora se aventó la puntada de obsequiar dos balones de voleibol para los alumnos de una numerosa escuela primaria en Huautla; por si fuera poco, Andrade Fayad lo presumió en las redes sociales, lo que le originó un sinnúmero de críticas y además porque también regaló un bote de pintura para la delegación municipal de la comunidad de Los Otates, municipio de Huejutla.

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que incongruente y de doble moral resultó el presidente municipal de Tenango de Doria, Aldo Molina Santos, quien critica a quienes plagian tenangos indígenas, pero él mismo contrató artistas pirata para celebrar la feria de su pueblo. La semana pasada, el edil anunció con bombo y platillo la presentación de Acapulco Tropical y la Sonora Santanera en el teatro del pueblo, pero gran sorpresa se llevaron los asistentes al percatarse de que ninguno de los conjuntos musicales era original. Molina, quien se ahorró una lana comprando parecido y más barato, fue incluido en la lista de alcaldes observados por la Auditoría Superior del Estado de Hidalgo (ASEH) al presentar anomalías por 110 mil pesos que no ha podido comprobar de su cuenta pública 2016.