Mixquiahuala no merece ese gobierno
 
Hace (8) meses
 · 
Compartir:

El municipio de Mixquiahuala no merece el gobierno que tiene. Como si no tuviera suficiente con un presidente municipal desdeñoso e ingrato, José Ramón Amieva, cuando pidió el voto, no dijo que dejaría las cosas no solo a medias, sino en un ejercicio mediocre, que apenas sí cumplió para no faltarle a las leyes, pero que en la primera oportunidad encontró la justificación que esperaba para irse sin una mayor explicación, más que la de hacerle un favor al movimiento de la 4T y que en vez de recibir críticas, solicitó comprensión y, prácticamente, agradecimiento del pueblo por hacer esto que consideró un esfuerzo en favor de Morena.
No es que los ciudadanos se hayan decepcionado de su decisión, decepcionados ya han estado desde que comenzó el gobierno; sin embargo, la grosería de irse así nomás profundizó en las lesiones a la marca, un partido que ofreció una alternativa de gobierno, nuevas formas de hacer las cosas, pero sobre todo, mejores, alejadas de la frivolidad, el combate a la corrupción, la cercanía con los ciudadanos y, desde luego, terminar con la historia del PRI y de los gobiernos corruptos.
Amieva representó para los ciudadanos una esperanza, pues al venir de terminar un gobierno en la capital del país, el de Mixquiahuala sería pan comido, como coloquialmente se dice, pero la decepción llegó prácticamente luego y se profundizó, cuando sus aspiraciones de ser gobernador de Hidalgo se diluían. Amieva pensó en sus cálculos políticos, utilizar como trampolín la presidencia municipal para convertirse en candidato al gobierno
de Hidalgo.
Por si fuera poco, sus arrebatos y aventuras ahora tienen sumido al municipio en una crisis política, derivado de la insensibilidad y de prácticas que se supone debían haberse superado y combatido.
Actualmente, la presidencia vive una suerte de conflictos y arrebatos por parte de un autonombrado presidente municipal, Yonattan Álvarez Cruz, cuya vanidad y ego evidencian su falta de tacto y oficio político, para sortear su cargo que se tambalea y que en breve estaría dejando, en medio del desfiguro y la pena ajena.
Pudieron más las pasiones personales que la prudencia para solventar todas las posibilidades de que su cargo y llegada al poder estuvieran seguros y no sumir al municipio en esta crisis política, donde los más afectados como siempre son los ciudadanos y, sobre todo, quienes impulsaron este movimiento de cambio.
Mixquiahuala seguirá siendo tema de debate en las siguientes semanas, mientras se define el futuro político y, con ello, continuarán evidenciándose los malos manejos, la corrupción, la crisis en el área de Seguridad Pública, el desvío de recursos, asuntos que son de mucho interés público, pero que, ante esta situación interna, han pasado a segundo término.
Aunado a todo ello, tenemos una presidencia que no informa, que hace mutis ante los cuestionamientos y los problemas y, con ello, engrandece la especulación y la sospecha de que todo lo que se dice es verdad.

Compartir:
Relacionados
title
Hace 2 días
title
Hace 2 días
title
Hace 3 días
Se dice
/seDiceGift.png
Especiales Criterio
/transformacion.jpeg
Suscribete
/suscribete.jpg
Más popular
Política actual impide el desarrollo: Marivel Solís
Por Gerardo Ávila . 24 de mayo de 2016
Por Gerardo Ávila . 9 de agosto de 2017
Por Federico Escamilla . 12 de febrero de 2018
Por Gerardo Ávila . 30 de noviembre de 2015

© Copyright 2023, Derechos reservados | Grupo Criterio | Política de privacidad