¡Fast food en aprietos!
 
Hace (25) meses
 · 
Fast fashion
Compartir:

El pasado mes de diciembre, en un hecho histórico, los trabajadores de una pequeña tienda de café Starbucks en Estados Unidos lograron conformar su sindicato. A partir de ese momento los demás trabajadores de distintas sucursales localizadas en la Unión Americana comenzaron a integrar igualmente sus propios sindicatos.

Uno de los principales reclamos de los baristas de esta cadena es el sueldo, que actualmente está en un rango entre los 17 a los 23 dólares por hora, y lo que están tratando de lograr es que este año sea de 25 dólares. De igual manera, intentan conseguir mejores condiciones de trabajo.

Obviamente, el corporativo está haciendo hasta lo imposible para que este movimiento no siga creciendo, ya que en total existen nueve mil tiendas en el país vecino. Intentan que en lugar de que se haga un sindicato por sucursal, esto mejor sea por regiones, y en algunos casos, convencer a los empleados de no formar un sindicato.

Las ventajas que están enarbolando los trabajadores tienen mucho que ver con la capacidad colectiva que van a conseguir y generar para negociar las condiciones laborales ya que de manera individual no lo han podido lograr en los últimos años.

Claro es, que todo esto que está aconteciendo pone nervioso a los accionistas de esta empresa y tan solo hay que ver que a raíz del anuncio en diciembre las acciones pasaron de valer 116 dólares a final de año, a 87 el día de hoy.

Todavía no se anuncia ninguna negociación con el primer sindicato, pero en cuanto esta se dé seguramente el primer impacto serán los sueldos y por ende, las utilidades de esta empresa se verán mermadas.

Muchas veces se ha satanizado en los países el tema del sindicalismo, pero al final del día, hoy más que nunca podemos darnos cuenta de que muchas de las grandes franquicias de alimentos pagan y tratan mal a sus trabajadores, y no es un tema de un solo país, este efecto lo podemos ver a lo largo y ancho del planeta y todo gracias a la globalización.

Podrán recordar el escándalo que hace algunos años hubo de una marca de tenis muy famosa que maquilaba sus productos en países asiáticos, en donde prácticamente las condiciones laborales eran totalmente inhumanas. Esto llevó a dicha empresa a cambiar el esquema de donde fabricaba “sus” tenis, además, a estar al pendiente de las condiciones laborales de los trabajadores. Lo mismo pasó con una marca de tiendas de ropa española que ha crecido exponencialmente; en estos casos, el factor de éxito y crecimiento económico puede resumirse a obtener costos de producción muy bajos a costa de los sueldos y las condiciones laborales.

Lo mismo sucede con algunas cadenas de comida rápida. En Estados Unidos este intento de conformar sindicatos ya lleva un rato. Trabajadores de Mc Donalds y Chipotle también se han estado organizando con el mismo objetivo que los de Starbucks.

Muchas de estas compañías aprovechan esquemas de contratar a estudiantes o a migrantes para llevar a cabo los trabajos a sabiendas de que son por un tiempo corto en lo que terminan sus estudios o consiguen otro empleo, por lo cual es muy difícil que se organicen para conformar sindicatos. Pero a raíz de la pandemia por el Covid-19, y el alto número de desempleados, la visión de los jóvenes en torno a lograr mejores condiciones de trabajo ha cambiado, por lo que se espera que en los próximos meses existan más sindicatos en Estados Unidos.

Será muy interesante ver qué acontece con Starbucks y las demás empresas de comida rápida, ya que puede que en otros países comiencen movimientos de trabajadores con el objetivo de sindicalizarse y obtener mejores condiciones, lo que definitivamente moverá el esquema del negocio y en muchos lugares el modelo no será viable.

Compartir:
Etiquetas:
Relacionados
title
Hace 29 minutos
title
Hace 59 minutos
title
Hace 1 hora
title
Hace 1 hora
Se dice
/seDiceGift.png
Especiales Criterio
/transformacion.jpeg
Suscribete
/suscribete.jpg
Más popular
Política actual impide el desarrollo: Marivel Solís
Por Gerardo Ávila . 24 de mayo de 2016
Por Gerardo Ávila . 9 de agosto de 2017
Por Federico Escamilla . 12 de febrero de 2018
Por Gerardo Ávila . 30 de noviembre de 2015

© Copyright 2023, Derechos reservados | Grupo Criterio | Política de privacidad