Hoy muchos vivimos con la esperanza de que ya exista una vacuna que nos permita protegernos del Covid 19. Esta semana salió a la luz pública la instrucción del gobierno federal de los Estados Unidos a través de la oficina de los Centros de Control y Prevención de Enfermedades (CDC Centers for Disease Control and Prevention) en donde les pide a los estados que se preparen para tener las vacunas listas para el 1 de noviembre y que hagan lo que se tenga que hacer para eliminar obstáculos que puedan interferir en la distribución de esta. La noticia se da en el momento justo en el que el presidente Donald Trump aparece en las encuestas de preferencia de voto por debajo de su contrincante Joe Biden para las próximas elecciones que se llevarán a cabo el 3 de noviembre. Todo indica que le queda muy poco tiempo al candidato del Partido Republicano para consolidar su campaña y reelegirse para otro periodo. Por ello la prisa de que exista y sea distribuida la vacuna lo antes posible. Esto no será nada sencillo debido a que las vacunas que han funcionado están actualmente en el periodo de prueba y requieren de tiempo para que se puedan observar los resultados y concluir si se puede pasar a la fase de producción masiva, distribución y aplicación. Es tanta la prisa y la importancia del efecto electoral positivo que se puede tener, que el propio presidente emitió un tweet el pasado 22 de agosto en donde acusa que existe un interés en contra de que se hagan las pruebas de la vacuna y que la oficina responsable de la autorización, FDA (U.S. Food Drugs Administration) está aplazando la resolución hasta después de que pase la elección, acusando de que miles de personas siguen muriéndose en su país. Y la verdad es que tiene razón; en Estados Unidos han muerto más de 190 mil 300 personas.
Trump le esta apostando todo para resolver este grave problema por ello ha destinado millones de dólares a la investigación y desarrollo de la vacuna, firmando convenios con los laboratorios para garantizar el acceso a la misma y que sea gratuita para la población.
En política no existen casualidades y debido a lo cerrado de la contienda, el poner en circulación la vacuna puede ser lo que le de el triunfo a Trump.
Esperemos que pase lo que pase, los científicos y las autoridades que aprueban las vacunas en los diferentes países no se brinquen ningún protocolo y antepongan el interés de la vida humana al político. Urgen las vacunas y algún medicamento que cure esta enfermedad, cada día que pasa las cifras de contagio y muertes siguen aumentando. Existen muchas tentaciones en todos los países por contar con la vacuna antes de tiempo, pero un error, una omisión puede costar la vida de miles o millones de personas. Lo que sí nos puede tener tranquilos es que gracias a esta competencia política todos los países nos veremos beneficiados por la velocidad con la que se está trabajando y muy pronto contaremos con la solución a esta pandemia y podremos ahora sí, volver a la normalidad.
