Queridos lectores, el día de hoy les escribo sobre algo que me han solicitado en estos días: ¿qué debo hacer o como puedo ser feliz?

La felicidad es algo que todos tenemos en común, pero muchas veces nuestra personalidad nos juega mal y terminamos limitando o incluso bloqueando día a día nuestros sueños, ya sea de manera consciente o quizá no, pero el resultado es el mismo: terminamos frustrados y culpando a todos, no tomando la responsabilidad de que ser feliz es una decisión únicamente nuestra, no de las circunstancias ni de tu pasado, sino de lo que haces hoy para lograr lo que te propongas o te haga sentir feliz.

Tu vida será como tú lo decidas; puede ser algo de lo cual siempre te arrepentirás o puede ser tu oportunidad para hacer lo que quieras. Deja de hacer todo aquello que no te provoca felicidad ni satisfacción y dedícate tiempo. Haz de la felicidad un hábito.

Comienza a eliminar acciones que día a día repites y al hacerlo es como poner una barrera de piedra delante tuyo y no poder avanzar.

Comienza por quitarte la idea de que necesitas la aprobación de la familia, de los colegas, de tus hijos, de alguien más.

¿A quién le importa lo que piensen de ti? Si eres feliz con las cosas que haces y las decisiones que tomas es más que suficiente. Lo primero que debes dejar de hacer es anteponer la opinión de terceros: mientras tú estés feliz con tu vida, los demás no tienen autoridad sobre ti.

Deja los sentimientos que, además de controlarte, te desestabilizan, tales como la ira y el rencor. trata de encontrar la forma de aprender a perdonar sin olvidar lo que te han hecho. De no hacerlo, con el paso del tiempo serás la única persona perjudicada. Ten siempre en cuenta que eres tú quien controla tus emociones.

Olvídate de la perfección, hay que trabajar de manera constante y perseverar para conseguir la vida que uno desee. Muchas de las decisiones que tomes en el camino afectarán tu forma de vida otras la mejorarán, así que déjate del drama y disfruta lo que tengas en el momento presente, no lo que tuviste o pudieras llegar a tener y siempre haciendo lo que te guste.

Muchas personas piensan que van a comenzar a vivir cuando se conviertan en millonarios, pero debes pensar de modo realista: llegar a ser millonario requiere un gran esfuerzo, trabajar con bastante dedicación y quizás hasta un golpe de suerte. Que el dinero no sea tu motor: sé tú el motivo. Encuentra una profesión o un trabajo que te apasione y sumérgete por completo en lo que esa experiencia significará para ti, no solamente porque ganarás tanto.

¿Quieres tener un cuerpazo, pero no tienes tiempo? Levántate más temprano y haz ejercicio. Elimina las excusas, sólo son pensamientos que te harán sentir mejor por no haber hecho algo que necesitabas o querías hacer. ¿Deseas resultados? Comienza a trabajar en ello, constancia y determinación dos palabras que debes poner en tu espejo y repetirlas a diario.

Recuerda: no todo lo puedes dejar para mañana. Vive el presente, organiza tu tiempo, haz de tus habilidades un beneficio y completa cada una de las tareas que te has propuesto lo más pronto posible. Esto te hará sentir libre de preocupaciones y te quitará estrés para poder realizar otras actividades que tenías pensadas.

Todos hemos sufrido alguna vez por alguien que amamos, pero cargar con los sentimientos negativos de las relaciones siempre resulta desastroso. No debemos pensar en dos personas al mismo tiempo. Si tienes pareja, no la compares nunca con tu ex, jamás serán iguales. Cuando inicies una relación, hazlo desde cero y construyendo algo hacia adelante, no retrocediendo y buscando cualquier cosa para detenerlo todo. Otro punto importante es dejar de perder el tiempo observando y juzgando a los demás, no conoces sus vidas ni sus batallas, así que hazte un favor y dedícate a lo tuyo.

Las personas felices tienden a gozar de elevados niveles de autoestima, se aceptan tal como son y se esfuerzan en mejorar ellos mismos, irradian seguridad, dejan de lado el alardeo. No hay razón para ser inseguros. Solo tú tienes la habilidad de crear una mejor versión de ti, mírate todos los días en el espejo y háblate bonito, eso te irá ayudando.

Al final del día, la única persona con la que puedes contar al cien por ciento eres tú. No cometas el error de poner tu felicidad en manos de otros. Sé dueño de tu felicidad y eso te ayudará a que seas autosuficiente.

¡Deja de vivir en el pasado! Ahí ya no hay nada para ti, excepto alguna lección para evitar los errores cometidos. Sigue adelante. No podrás tener un mejor futuro si te la pasas viendo hacia atrás.

Necesitas dejar que las cosas ocurran, así es la vida. Pasarte la vida estresada por cosas que no están en tus manos no es sano. Intenta relajarte y dejar que las cosas sucedan a su ritmo, no te ancles al pasado y tampoco sufras por el futuro, vive el hoy.

Dirigir tus expectativas es la clave, si son claras y realistas, nunca te decepcionarás. Algunos tendemos a creer que la forma en la que otros establecen sus metas funcionará con nosotros, pero esto no es posible. Debes buscar tu propio método y encontrar tu propio camino.

Abre tu mente: es la única manera en la que podrás crecer e ir hacia delante de una forma asertiva. Eso te hará sentir satisfecho y créeme, te llevará al camino de tu felicidad.

Como siempre, les deseo larga vida, salud y prosperidad.

Hasta la próxima.

Alberto Tristany Zarauza