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Hace (12) meses
Participación ciudadana: la clave para recuperar Tula

Noé Paredes Meza – columna

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Tanta sociedad como sea posible y sólo tanto gobierno como sea necesario…” ¿Cómo hacemos más “sociedad” y cómo delegamos “lo necesario” a nuestros gobiernos? ¿A qué tipo de sociedad pertenecemos y qué tipo de gobiernos sostenemos?

Son algunas de las preguntas que me surgieron hace poco cuando reflexionaba sobre la importancia de la participación ciudadana en el ejercicio de la democracia y en la construcción de ciudades con futuro.

No hay democracia sin participación social. No hay futuro sin participación de la sociedad. Vale la pena recordar uno de los datos que encontré en el Índice de Competitividad Estatal 2022 realizado por el IMCO (Instituto Mexicano para la Competitividad). En los resultados del subíndice “Sistema Político Estable y Funcional”, Hidalgo se encuentra en la posición número 25 de 32 estados en la república mexicana, en una posición con cla sificación “media baja” y por debajo de estados como Oaxaca, Michoacán y Guanajuato.

Dicho subíndice mide el potencial de los sistemas políticos locales para ser estables y funcionales y se incorporan indicadores como la participación ciudadana, la percepción de la corrupción en partidos políticos y a nivel estatal, el número de organizaciones de la sociedad civil operando, entre otros.

Nos seguimos quedando atrás, en los últimos lugares de cada uno de los índices y rankings sobre los temas cruciales en nuestro país.

¿Qué pasa con Hidalgo? Considero que, las y los ciudadanos nos hemos acostumbrado a gobiernos paternalistas que utilizan cada uno de los programas y apoyos como subsidios con fines electoreros. Así, los mismos de siempre, tienen un arma infalible para continuar ejerciendo poder sobre una sociedad que prefiere voltear la cara y justificar su nula participación e involucramiento en diferentes causas pregonando sobre lo descompuesto que está el sistema y la política.

¿Es culpa de los políticos y del sistema? Sí. Pero es culpa nuestra también, de las y los ciudadanos que preferimos cambiar de tema cada que se habla de política y cada que alguien menciona que “la política es una porquería” o que no están interesados en nada que tenga que ver con política. La política la hacemos todos y es de todos. La participación ciudadana es un derecho, no una dádiva que los gobiernos pueden ofrecer de manera arbitraria. Es algo que debemos entender y es una ideología que, como ciudadanos, debemos apropiarnos.

En Tula lo estamos haciendo de manera responsable y sin los lastres de la política tradicional, que genera desconfianza. Durante los últimos años y a raíz de diferentes tragedias que nos permitieron abrir los ojos, las y los tulenses, a través de la sociedad civil organizada, hemos decidido organizarnos para abanderar un mismo frente que tiene como objetivo recuperar nuestro municipio: su salud, su identidad, su economía y cada una de las bondades de las que nos hemos olvidado.

Así, hemos sido testigos de diferentes esfuerzos que se van sumando a una propuesta integral para construir el Tula que todas y todos queremos y merecemos.

Estamos vinculándonos y estamos construyendo. Estamos mejorando nuestra participación ciudadana y con ello, evitamos quedarnos a la espera de la buena voluntad de personas que ocupan los espacios de la toma de decisiones. Sin embargo, aún quedan tareas pendientes.

Por ello, es indispensable avanzar en la con quista de más espacios y en la defensa de los que ya se han ganado en esta lucha. Sigamos organizándonos, proponiendo y exigiendo. Sigamos participando, es la clave para recuperar Tula.

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