Cómo ser más feliz
Estimados lectores, el día de hoy les daré tres tips para ser más feliz. Me dirás que quizá ya eres feliz, pero tal vez no cuando quisieras o como tú quisieras. No son secretos ni estamos descubriendo el hilo negro, es simplemente seguir estas pautas para que tu melodía emocional mejore o suene a tu gusto.
Como ya lo he mencionado en artículos anteriores, todos los estados emocionales son útiles en cada momento de nuestra vida y si estuviéramos siempre felices, en algún momento dejaríamos de estarlo, aunque suene paradójico. Por ejemplo, cuando llegas a un restaurante y en algún momento de tu estancia dejas de percibir los olores es porque tu cerebro se ha acostumbrado, por eso es importante pasar por los diferentes estados.
Ser feliz es una habilidad, un hábito, una decisión, se trata de sentirnos bien y tratar de mejorarlo cada día.
Ahora sí, sin más preámbulo te daré estos tips basados en programación neurolingüística (pnl) y confirmadas al pasar de los años.
- En el pasado se encuentran todos tus aprendizajes, la familiaridad, la seguridad; gracias a los recuerdos podemos reconocer la voz y la cara de nuestros seres queridos, evitar peligro e incluso no caer en los mismos errores, pero en la memoria se guardan los recuerdos aún los dolorosos que se detonan sin control, acciones que quizás no te hubiera gustado realizar, la culpa el remordimiento, el rencor están asociados a un resultado que no hubiéramos deseado que ocurriera. También hay aprendizajes de quién eres y lo que eres capaz o no de hacer y por supuesto también sobre el mundo que te rodea.
Busca un recuerdo y fíjate si lo estás viendo en primera persona o te estás observando en ese recuerdo como si vieras un documental de tu vida. Si te estás viendo en primera persona, mentalmente siéntate delante de un televisor e imagínate que estás viendo el documental de todo lo que sucedió, ahora que ya tienes una imagen pregúntate si hay algún aprendizaje de ese momento, algo que guardar, o bien si hay una intención o algo de utilidad en ese sueño, por ejemplo evitar hacer el ridículo otra vez o bien evitar que vuelvas a sentir dolor. Agradece a tu mente que te esté avisando y en ese momento disminuye la imagen, ponla en pausa y ve cómo se va alejando de ti hasta convertirse en un punto, ya que estará ahí para recordarte lo que no se debe hacer, pero sin el sentimiento o la emoción. Pregúntate qué es lo que estás sintiendo sobre esa situación que no te permite alejar la imagen.
- Vivir en el presente. Es poner la atención en lo que te sucede ahora. Es fundamental para tomar consciencia y disfrutar de todo lo que la vida tiene para ofrecernos, esto permite poner la atención en los demás, sentirte más vivo y aprovechar cada uno de tus errores para aprender. Pon el foco en lo que está delante de ti y así puedas actuar, en vez de preocuparte por lo que ya fue, actúa en el aquí y ahora para conseguir tus objetivos, solo así sabrás cómo podrás actuar para cambiarlo, escanea tu cuerpo, comienza por los pies, hazte una imagen mental de las sensaciones que te transmite cada parte de tu cuerpo y presta atención a lo que te está queriendo decir, bájale el volumen agradeciendo que esté pero que no es necesario que esté tan presente, ayuda mucho el pensar que tienes un control remoto y que puedes bajar el volumen; si esto no funciona pon tu atención en un objeto que tengas en ese momento, no veas ni pienses en nada más.
- El futuro es donde está ese lugar maravilloso lleno de esperanza, ilusión y sueños, pero también está la preocupación, la incertidumbre y la frustración, nuestra sociedad se enfoca mucho en los logros, conseguir objetivos, pero conseguir nunca es suficiente, nos acostumbramos fácilmente a la satisfacción del éxito y queremos más hasta el grado de convertirse en una adicción que nos puede vaciar de la verdadera esencia.
Los orientales lo tienen muy claro. “El secreto está en el camino, no en la meta”. Enfocarte en el camino te llena de congruencia, te conecta con quien eres y le da sentido a tu vida, en lugar de pensar en lo que quieres empieza a imaginarte un futuro con cómo quieres avanzar hacia tus metas. Imagina un camino lleno de las actividades que disfrutas, de aquello que, aunque sea difícil, te satisface, un camino siempre debe contemplar lo que puede ir bien y lo que pueda ir mal pero siempre ir viendo más allá; aunque te caigas, nunca dejes ahí tu película, sigue avanzando y aunque la caída haya sido dolorosa, te levantas y sigues.
Vivir el aquí y el ahora es útil, pero un mundo con un propósito nos impulsa a ayudar a los demás a hacer algo transformador, a dejar un legado, solo dejarás de tener miedo a perder cuando puedas visualizar después de cada perdida habrá otra ganancia, construye ese camino en tu mente, sabiendo que algunas veces las cosas irán mejor y otras veces no, pero es imposible que se mantengan igual; esto pasa igual que el planeta, nunca permanece quieto por lo tanto es importante moverse para no quedarte atrás.
Cuando el camino se vuelve tu objetivo, los miedos e incertidumbres se reducen y tu vida se llena, así que ya sabes cuales son las pautas para mejorar tu vida y conseguir la felicidad.
Como siempre, te deseo larga vida, salud y prosperidad y que este 2022 sea tu año
